Ayuda a la Iglesia que Sufre: solidaridad en tiempos de pandemia

Publicado el: 7 Junio, 2021

‘Ayuda a la Iglesia que Sufre’ (ACN-Chile) abrió una oficina en Chile en 1998. Desde entonces trabajan sin descanso para responder a las solicitudes de oración y ayuda de miles de cristianos que sufren, y de sacerdotes, misioneros y religiosas, que por pobreza o persecución, ven dificultada su labor de evangelización y de apoyo a las comunidades más necesitadas del país y del mundo.

Debido al contexto actual ACN-Chile se ha visto en la obligación de repensar sus estrategias, para así continuar con su importante labor pese a la pandemia. En esa línea, Magdalena Lira Valdés, directora nacional de ACN-Chile, se refirió a los desafíos que han debido sortear: “Sin duda la pandemia se ha convertido en un gran desafío para realizar nuestro trabajo. Por un lado, las necesidades de ayuda han aumentado. También, la crisis económica que ha traído la pandemia, ha impactado en la capacidad de las personas para hacer donaciones. Por eso, nuestro trabajo ha sido más desafiante que nunca”.

Tras lo anterior, añadió: “Sin embargo, nos ha sorprendido la generosidad de la gente que, a pesar de estar viviendo en primera persona las dificultades de la pandemia, siguen apoyando nuestros proyectos. Hay una frase que siempre nos repetimos: ‘El hombre es mucho mejor de lo que pensamos’. Esto lo hemos visto y vivido durante todo este tiempo”.

Respecto de las campañas que actualmente existen para ayudar a la comunidad, Magdalena comentó que “estamos apoyando a la comunidad de la parroquia San Saturnino, en la comuna de Santiago, donde las personas se han visto muy afectadas económicamente producto de la pandemia. La parroquia abre sus puertas a todos, entregando alimentos, baños a las personas en situación de calle, entre otros. Sus oficina y salones parroquiales se dañaron con el terremoto de 2010 y desde entonces funcionan en instalaciones provisorios. Nosotros queremos ayudar a reconstruir sus dependencias”. 

“También, apoyamos a comunidades que han sido víctimas de la violencia que produjo el estallido social. De manera especial a los fieles de la parroquia La Asunción, en Santiago, que fue incendiada. Estamos en un proyecto de rehabilitación de sus salones parroquiales, para que la comunidad tenga un lugar donde reunirse”, declaró.

Si alguien quiere sumarse a estas campañas, lo puede hacer en la web www.acn-chile.org o a través de una transferencia a la Cuenta Corriente 11175-9 del Banco Santander, a nombre de Ayuda a la Iglesia que Sufre, RUT 73.537.400-1, mail: acn@acn-chile.org , asunto: causa a ayudar.

 

 

Ayuda a la Iglesia que Sufre: solidaridad en tiempos de pandemia

‘Ayuda a la Iglesia que Sufre’ (ACN-Chile) abrió una oficina en Chile en 1998. Desde entonces trabajan sin descanso para responder a las solicitudes de oración y ayuda de miles de cristianos que sufren, y de sacerdotes, misioneros y religiosas, que por pobreza o persecución, ven dificultada su labor de evangelización y de apoyo a las comunidades más necesitadas del país y del mundo.

Debido al contexto actual ACN-Chile se ha visto en la obligación de repensar sus estrategias, para así continuar con su importante labor pese a la pandemia. En esa línea, Magdalena Lira Valdés, directora nacional de ACN-Chile, se refirió a los desafíos que han debido sortear: “Sin duda la pandemia se ha convertido en un gran desafío para realizar nuestro trabajo. Por un lado, las necesidades de ayuda han aumentado. También, la crisis económica que ha traído la pandemia, ha impactado en la capacidad de las personas para hacer donaciones. Por eso, nuestro trabajo ha sido más desafiante que nunca”.

Tras lo anterior, añadió: “Sin embargo, nos ha sorprendido la generosidad de la gente que, a pesar de estar viviendo en primera persona las dificultades de la pandemia, siguen apoyando nuestros proyectos. Hay una frase que siempre nos repetimos: ‘El hombre es mucho mejor de lo que pensamos’. Esto lo hemos visto y vivido durante todo este tiempo”.

Respecto de las campañas que actualmente existen para ayudar a la comunidad, Magdalena comentó que “estamos apoyando a la comunidad de la parroquia San Saturnino, en la comuna de Santiago, donde las personas se han visto muy afectadas económicamente producto de la pandemia. La parroquia abre sus puertas a todos, entregando alimentos, baños a las personas en situación de calle, entre otros. Sus oficina y salones parroquiales se dañaron con el terremoto de 2010 y desde entonces funcionan en instalaciones provisorios. Nosotros queremos ayudar a reconstruir sus dependencias”. 

“También, apoyamos a comunidades que han sido víctimas de la violencia que produjo el estallido social. De manera especial a los fieles de la parroquia La Asunción, en Santiago, que fue incendiada. Estamos en un proyecto de rehabilitación de sus salones parroquiales, para que la comunidad tenga un lugar donde reunirse”, declaró.

Si alguien quiere sumarse a estas campañas, lo puede hacer en la web www.acn-chile.org o a través de una transferencia a la Cuenta Corriente 11175-9 del Banco Santander, a nombre de Ayuda a la Iglesia que Sufre, RUT 73.537.400-1, mail: acn@acn-chile.org , asunto: causa a ayudar.

 

 

Publicado el: 7 Junio, 2021
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