Carta de solidaridad de la Conferencia Episcopal de Chile con la Iglesia de Haití

Publicado el: 15 Agosto, 2021

El presidente y secretario general de la Conferencia Episcopal de Chile, en representación del episcopado nacional, han enviado un mensaje al pueblo de Dios que peregrina en Haití, comprometiendo su oración y formas de colaboración con la acción pastoral y solidaria en favor de los más pobres y afectados por el terremoto ocurrido este 14 de agosto en dicho país. Añaden, que esperan fomentar nuevos acercamientos con los hermanos haitianos que viven en Chile y que sufren a la distancia por su patria.

En misiva dirigida a Mons. Launay Saturné, Arzobispo de Cabo Haitiano, Presidente de la Conferencia Episcopal de Haití se expresa, en primer lugar: “Ante el trágico terremoto que ha tenido lugar el día de ayer en vuestro país, hacemos llegar a Ud. y a toda la Iglesia que peregrina en Haití, nuestra cercanía, comprometiendo nuestra oración por todo el pueblo haitiano, especialmente por aquellos que han perdido la vida, sus familiares, y por todos quienes están sufriendo más gravemente las consecuencias de este acontecimiento”.

“Lamentamos que a la dura realidad de pobreza y violencia que viven como nación, se sume esta tragedia natural. Esperamos, por lo mismo, junto a toda la Iglesia del continente, encontrar formas de colaboración con la acción pastoral y solidaria que realiza la Iglesia haitiana en favor de los más pobres y los afectados por este terremoto. Esperamos, también, fomentar nuevos acercamientos a hermanos haitianos que viven en nuestro país, que también sufren, desde la lejanía, por esta tragedia que enluta a sus seres queridos y a su patria a la que siguen vinculados”, agrega el mensaje de la presidencia del episcopado chileno.

Al finalizar la carta, el presidente de la CECh, cardenal Celestino Aós Braco y el secretario General, obispo Sergio Pérez de Arce Arriagada; encomiendan a “la Virgen María, a quien hoy celebramos en su asunción a los cielos, la vida y los desafíos del pueblo haitiano, para que encuentre su apoyo en el Dios que extiende su misericordia de generación en generación”.

Fuente: Comunicaciones CECh

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