El centro de Rehabilitación de alcoholismo y drogadicción Renace-Curanilahue cumplió dos años de servicio desde que abriera sus puertas, hermosa obra social que nace en el seno de la Parroquia san José de Curanilahue, como fruto del año de la misericordia.
“El alcoholismo y la drogadicción son uno de los flagelos que más afectan a las familias de la comuna de Curanilahue, es por este motivo que como Iglesia nace la necesidad de llegar a este grupo de personas más vulnerables, creando una ONG para dar sustento a este centro de rehabilitación ambulatorio”, da cuenta el padre Pablo Leiva, párroco de Curanilahue.
“Nuestro Centro – agrega – se sustenta gracias al aporte de unos 60 socios que mes a mes apoyan económicamente la obra; además, contamos con subvención municipal, adjudicación de proyectos y profesionales que trabajan de manera voluntaria”.
El centro se encuentra compuesto por un directorio de 6 personas, un equipo técnico compuesto por médico, psicólogos, trabajadora social, asesores espirituales, educadores y monitores de talleres.
Durante estos dos años de trayectoria se han inscrito más de 100 personas y actualmente se cuenta con 15 pacientes que asisten de forma regular a sus terapias y talleres. Algunos de ellos llevan más de un año en rehabilitación, asistiendo a sus terapias y talleres de cuero, huerta, cursos, uno de ellos un curso de gasfitería que será certificado.
Dentro de las actividades realizadas, en el marco del segundo aniversario, se realizó una cena donde se invitó al directorio de la ONG, equipo técnico, asesores espirituales y personal del centro. También se realizó un encuentro con pacientes, una visita a la radio local y el domingo 12 de mayo se realiza la eucaristía de acción de gracias por el aniversario en la que están invitados los miembros que conforman el Centro y la ONG Renace-Curanilahue.
