Una comunidad escolar llena de vitalidad, que manifiesta a través de su alegría un crecimiento tanto en la fe como a nivel material, es la que forma parte del Instituto de Humanidades ‘José Manuel Santos’ de Chiguayante, que recientemente celebró su tercer año de vida.
La Eucaristía de aniversario estuvo presidida por el asesor espiritual del Instituto, padre José Durán, junto al Vicario para la Educación Pbro. Francisco Osorio. Padres y apoderados, alumnos y funcionarios del establecimiento llenaron la capilla Jesús Obrero, para dar gracias a Dios y compartir el caminar de 260 niños y niñas desde los niveles pre escolar hasta segundo año básico.
En primer lugar, el profesor Ariel Retamal entregó una reseña de don José Manuel Santos, de feliz memoria, ex arzobispo de Concepción en cuyo honor se dedicó el Instituto. Luego, el rector don Hernán Rivas explicó la insignia del colegio, para dar paso a la celebración eucarística propiamente tal. En ella destacó la participación de los pequeños, que leyeron las peticiones de perdón, oraciones de los fieles, entregaron los dones y recolectaron la ofrenda. Precisamente en el ofertorio se vivió un instante muy especial, cuando los alumnos de 2° año básico Miguel Ángel González y Ayline Aguilera junto a la profesora Sra. Ingrid Oróstica, presentaron el estandarte del Instituto. Luego, José Tomas González y Carolina Muñoz Cuminao llevaron al altar un pañolín de la agrupación “Amigos de Jesús”, que los guiará en la realización de sus actividades pastorales. Al finalizar este momento, los profesores Ximena Lerzundi y Ariel Retamal ofrendaron dos tortas de plumavit con racimos de uvas pintados y elaborados por los alumnos, como signo del fruto que crece unido a la vid.
Consultado acerca de su impresión ante el crecimiento en la fe y progreso material de la comunidad educativa, el rector don Hernán Rivas indicó que “en primer lugar es una alegría inmensa ver la respuesta que año a año vamos recibiendo, que se traduce en una presencia cada vez más numerosa en actividades como la que nos acaba de convocar. Esto es un signo de la aceptación de nuestro servicio educativo como colegio católico por parte de los padres y apoderados, que es mérito de todo el personal de nuestro Instituto”. “A la par de este crecimiento como comunidad, tenemos el progreso material dado por la construcción del moderno edificio que a contar del próximo año cobijará a nuestros estudiantes. El mérito principal de esta obra es del equipo de la Fundación La ‘Asunción’, que ha tenido la voluntad y el trabajo de gestionar los recursos financieros para llevar a cabo este hermoso proyecto”.
En Chiguayante, el crecimiento de la comunidad fundido con el nuevo edificio para el Instituto de Humanidades, son signo del aporte y servicio que entrega la Iglesia de Concepción en este sector de la Arquidiócesis.
