Con la invitación a transformar el mundo más allá de las aulas, donde se impregnaron del espíritu asuncionista, la comunidad educativa del Liceo La Asunción de Talcahuano celebró el hito de envío y licenciatura de sus estudiantes de cuarto año medio.
La Eucaristía fue presidida por el capellán sacerdote José Francisco Osorio Muñoz, quien motivó a los jóvenes a ser sal y luz del mundo. Éstos respondieron renovando sus promesas bautismales, asumiendo la responsabilidad de ser protagonistas en medio de la sociedad.
Posteriormente se inició la licenciatura, con los saludos protocolares, la entonación del himno nacional y las palabras del rector don Héctor Alcacibar Gayoso, quien despidió con cariño y gratitud a los egresados. Les pidió que no olvidaran lo aprendido en el colegio, la excelencia académica y humana que lograron en su formación.
A continuación, se entregaron los premios al mejor promedio desde primer a cuarto año de enseñanza media, con mención especial a la alumna Javiera Muñoz Bobadilla, que promedió un siete en toda su vida escolar. Otras de las distinciones fueron participación estudiantil, padre Lorenzo Schamberger, mérito extraescolar, mejor compañero, participación pastoral, trayectoria escolar y finalmente el Premio Fundación Educacional La Asunción y Cristo Rey, entregado por su vicepresidenta ejecutiva Sra. Millaray Villablanca Ibáñez a la alumna Daniela Soledad Ríos Rojas.
La educación no cambia al mundo: cambia a las personas que van a cambiar el mundo. Con esas palabras, los locutores introdujeron el momento de la entrega de las licencias. Uno a uno subieron al escenario los estudiantes de los cinco cursos de cuarto año medio, guiados por sus profesores Katia Guzmán Sanhueza, Ana Andrade Chávez, Nataly Rivera Acuña, Mónica Fonfach Venegas y Porfirio Bustos Espinoza. En representación de los egresados, pronunció el discurso de despedida la alumna Alejandra Muñoz Manosalva.
Con las dulces voces de los estudiantes del ciclo menor, que entregaron el último adiós, más de doscientos asuncionistas dejaron el gimnasio del liceo, ante el aplauso y muestras de afecto de toda la comunidad educativa.
FUENTE: Comunicaciones Colegios del Arzobispado de Concepción.
