La comunidad parroquial, junto con todas las obras de los Sagrados Corazones, se reunió en el templo del Colegio, para celebrar y recordar el trabajo misionero de San Damián de Molokai que realizó con los más abandonados.
La comunidad effeta sorprendió a las mamitas que asistieron a la misa, entregando a cada una de ellas una hermosa flor y también el coro parroquial les dedicó una linda canción, a todas las mamás presentes y a aquellas que no están físicamente.
El momento más emotivo se vivió cuando el Párroco padre Erwin invitó a todas las mamás a que se acercaran al altar, y les dio una hermosa bendición, consagrando su vida a la Virgen María con el rezo del Dios te Salve María.