“Corte y Confección” fue el nombre del curso que permitió a 25 participantes de la comunidad terapéutica “Dejando Huellas” del Centro de Cumplimiento Penitenciario del Bío Bío conocer e identificar distintas técnicas de confección y costura, con el objetivo de adquirir herramientas y destrezas que pudiesen servir como modo de sustento en su etapa de reinserción social.
La iniciativa fue parte del proyecto “Puntada a puntada me voy superando “2018”, financiado con el Fondo de Apoyo a Obras Sociales, Papa Francisco, otorgado por la Dirección de Pastoral de la Universidad, y que tuvo como responsable a Giannina Boyardi, egresada de la carrera de Trabajo Social de la Casa de Estudios.
Para ejecutar el proyecto, Boyardi contó con la colaboración de Gendarmería de Chile y de la Sociedad Concesionaria Grupo Do s S.A.(Sodexo), instituciones que valoraron la actividad y destacaron la importancia de aportar a la rehabilitación de los internos. “Nuestra mirada y aporte a la comunidad se ve concretada con esta asociación con la UCSC. Esta iniciativa permite salir de uno mismo, superarse y generar un bien mayor”, comentó el gerente de Sodexo, Osvaldo Alarcón.
“Pese a estar en estado de reclusión no hemos olvidado el identificarnos con los más necesitados. Este tipo de iniciativas nos permiten darnos cuenta de que se puede romper el círculo en el que hemos vivido y salir de la delincuencia, nos hace cuestionarnos el estilo de vida que hemos escogido”, sostuvo Luis Gómez, uno de los beneficiados.
Los productos elaborados en el curso se utilizarán como insumos de mejora de los espacios comunes, principalmente, del comedor y sala de visitas. Por su parte, las mochilas y delantales tendrán como destinatarios a los niños y niñas de la Escuela Hospitalaria, dependiente de la Dirección de Administración Educación Municipal de Concepción.
