Responsables de las seis sedes de Concepción y de la Conferencia Episcopal de Chile se reunieron en Casa de Formación Betania en la arquidiócesis penquista el lunes 15 de octubre, con el objetivo de compartir los contenidos, propuesta metodológica y programación de cada uno de los días del Congreso Nacional de Jóvenes que se realizará del 23 al 27 de enero de 2013.
La cita fue encabezada por el Pbro. Pablo Leiva Rojas, director de la Comisión Nacional de Pastoral Juvenil, quien presentó a los responsables de la Conferencia Episcopal, a los coordinadores de área del Congreso y a los jefes de cada una de las sedes, radicadas en las parroquias El Buen Pastor, La Ascensión del Señor, San Pablo, Santa Cecilia, La Asunción y San Juan de Mata.
Luego intervino Marcelo Neira Díaz, responsable de los contenidos y metodología del Congreso, quien destacó que los jóvenes “congresistas” que asistan “se encontrarán con una oportunidad de ser Iglesia. Ser parte activa en los procesos de cambio que hoy necesita la Iglesia joven, para compartir el gozo de haberse encontrado con Jesús en las nuevas generaciones y tiempos históricos. Será una instancia para encontrarse con otros jóvenes para compartir este gozo, y con la posibilidad de reconocerse con una vida abundante. El congreso constituirá un proceso de inflexión donde los mismos jóvenes y también agentes pastorales, animadores, párrocos, obispos, nos daremos la oportunidad de mirarnos de manera nueva, caer en la cuenta que no nos falta nada, porque el Señor siempre está con nosotros y eso es lo más importante”.
Una vez que se presentó y revisó el cronograma Congreso, se visitó cada una de las sedes ubicadas en las comunas de Chiguayante, San Pedro de la Paz, Concepción y Talcahuano, las que acogerán en total a cerca de 4 mil jóvenes.
Al concluir, director de la Comisión Nacional de Pastoral Juvenil padre Pablo Leiva evaluó como positiva esta instancia de programación, indicando que “ha sido una reunión muy importante, que permitió un trabajo conjunto entre el equipo nacional, diocesano y de las seis sedes. El hecho de compartir los contenidos y metodologías, junto con la dimensión litúrgica y de oración, permite que los responsables de las sedes tengan mayor conocimiento de esta tarea. Fue muy positivo encontrarnos, compartir experiencias y despejar dudas. Todos salimos más fortalecidos lo que por supuesto da tranquilidad y alegría al constatar que el proceso preparatorio al Congreso tiene avances día a día”.
Larry Henríquez Bravo – Periodista / Comunicaciones Congreso Nacional de Jóvenes