Con bailes religiosos del norte, la Virgen del Carmen Misionera fue honrada durante la procesión llevada a cabo este domingo desde la parroquia Santa Cecilia de Talcahuano hasta la Comunidad Santa Clara donde reside la imagen que llegó hace un año para quedarse.
Personas de muchas partes se hicieron presentes, para acompañar la procesión que tuvo la particularidad de contar con la asistencia de Cofradías de bailes religiosos del Norte, que vinieron a rendir honor a la Virgen del Carmen Misionera. Al rededor de 60 personas llegaron desde Copiapó con sus bailes religiosos, haciendo un enorme esfuerzo para viajar. El grupo llegó el viernes 12 y se quedaron en la comunidad, donde se les habilitó un salón, para luego regresar el lunes 15 a su ciudad nortina.
La procesión concluyó con la celebración de la Eucaristía, presidida por el padre Mauricio Aguayo, Vicario Pastoral de nuestra Arquidiócesis, en representación de Monseñor Chomali, y concelebrada por el padre Germán Hermosilla, párroco de la parroquia Santa Cecilia. El padre Mauricio hizo bastante referencia a la devoción del baile (como le llaman al grupo de diablada), “porque si para uno era cansador caminar cuanto más para ellos que no pararon ni un momento de bailar para la Virgen”, señaló.
El grupo nortino realizó la promesa de venir cada año al santuario a bailarle a la Virgen, ya que pudieron experimentar la especial acogida que les hicieron en esta zona, donde fueron atendidos con mucho cariño. “De todos los lugares donde hemos ido a devocionar a la Virgen nunca habíamos vivido una experiencia como acá, donde nos hemos sentido tan queridos”, manifestó uno de los integrantes.