El domingo 6 de abril los fieles y el párroco de la Parroquia San José de Curanilahue recibieron con profunda alegría a las religiosas Salesas Misioneras de María Inmaculada que abrieron una nueva comunidad en Curanilahue.
Las nuevas religiosas fueron presentadas por la Responsable de la Congregación en Chile, Hermana Marisol Seguel en la Eucaristía dominical, la acompañaron las religiosas de la comunidad que sirve en Concepción; las religiosas que llegan a Curanilahue son las Hermanas LuzBramm y Adriana Rivas, las que se integrarán al quehacer parroquial, especialmente en el acompañamiento de grupos y comunidades. Las religiosas manifestaron su profunda alegría de estar en Curanilahue y contaron que llegan llenas de esperanza para servir al pueblo de Dios en tierras araucanas.
Por otro lado, con gran gozo y alegría, las Hermanitas de la Anunciación recibieron del 3 al 9 de abril del presente mes la visita de la Superiora General Hnta. Lisbeth Agudelo Agudelo junto con la Hnta. Enith Vergara Consejera General , las cuales viajaron desde Colombia con el objetivo de animar la dimensión fraterna, espiritual y evangelizadora de la comunidad local y al mismo tiempo evaluar la presencia de las Hermanitas, para su continuidad o no en la comuna de Curanilahue particularmente en la parroquia de San José.
Durante estos días la Superiora General se mostró gustosa del trabajo desempeñado por parte de las hermanitas, escuchando los comentarios de las personas, participando de algunas reuniones, observando la sencillez y sintiendo la cercanía de los curanilahuinos. Finalmente la Hnta. Lisbeth después de haber dialogado con monseñor Fernando Chomali, confirma la continuidad de la Congregación Hermanitas de la Anunciación en la comuna de Curanilahue- Chile, para alegría de toda la comunidad.
Consultado el párroco sobre lo vivido este domingo, expresó: “la vida religiosa es una gran bendición para la Iglesia, la presencia de las dos congregación en nuestra Parroquia nos llena de esperanza porque el testimonio de entrega y fidelidad al Señor que se aprecia en ellas nos anima a todos a seguir a Cristo y estoy seguro que me ayudaran mucho en mi servicio pastoral”. Después de la Eucaristía el párroco invitó a todas la religiosas a un almuerzo en la casa parroquial.
