35 jóvenes de distintas ciudades de chile que forman parte de Trabajo País en la Pontificia Universidad Católica de Santiago, llegaron hasta Lota para compartir con su gente y trabajar en la construcción de un comedor solidario, dependiente de la parroquia San Matías Apóstol.
Este comedor funciona desde hace un tiempo, pero no contaba con un lugar propio, debiendo almorzar los abuelitos, en varias ocasiones, en la calle; ya que la sede no siempre estaba disponible.
Trinidad Santa Cruz, estudiante de Literatura, a su 20 años es la jefa de zona de este grupo que viajó hasta esta comuna “hemos estado haciendo talleres, compartiendo con la gente, las señoras nos han traído sopaipillas, panes; ayer mismo fuimos a comer con los jóvenes de la parroquia”, señaló la joven voluntaria.
Por su parte, Ignacio López, es el otro jefe de zona que acompaña a este equipo de trabajo, junto a sus estudios de agronomía, complementa su quehacer con estos trabajos voluntarios que enriquecen su experiencia de vida, “como trabajo país nuestra misión es ir a distintas zonas del país, en este caso concreto hablamos con el padre Jorge Araya, párroco de Lota Alto, y nos dijo que necesitaban un comedor en donde poder darle alimento a los ancianos, así que aquí estamos”, destaca este futuro profesional.
Será un lugar sencillo y digno que llevará siempre presente el sello de que hubo jóvenes que viajaron desde lejos, dejando sus comodidades para ayudar al prójimo e irse con hermosas experiencias.
