La Vicaría de Arauco recibió la visita del Arzobispo de la Arquidiócesis, quién fue invitado por el Párroco José Miguel San Martín a conocer a las personas de su comunidad.
En el marco de la celebración de 108 confirmaciones, el sacerdote quiso que Monseñor también visitara algunos de los sectores más alejados de la comunidad. Fue así que Monseñor emprendió un viaje por distintos lugares. Comenzó el día acompañando a los jóvenes del Liceo San Francisco de Asís en la Finalización del Mes de María. Y la Hermana Nayer Elgueta, Directora del Colegio dijo que “para nosotros como Liceo es un gran signo de fe que el Arzobispo nos acompañe en estas instancias, para acercar más a nuestros alumnos la figura de Cristo. En nuestro colegio y en Arauco hay muchos evangélicos, pero nosotros sólo les pedimos un signo de respeto”, comentó.
Las comunidades de Bajo Raqui y Las Peñas acogieron al Arzobispo con un compartir con distintos alimentos típicos de la zona preparados por ellos como sopaipillas, quesos, huevos duros, empanadas de mariscos y mate.
En Bajo Raqui luego de la recepción en una sede financiada con fondos del gobierno, peregrinaron hasta la Capilla cargando la imagen de la Virgen. Ante la necesidad de la comunidad por mejorar la infraestructura de la Capilla, Monseñor se comprometió a ayudar con un porcentaje del dinero que necesitan para arreglarla.
Durante la visita las comunidades manifestaron agradecimiento y alegría por la visita de la autoridad eclesia, ya que según comentaron, se sienten muy solas y abandonadas, ya que viven en sectores rurales alejados. En bajo Raqui, no tienen locomoción colectiva cerca y para ir al pueblo deben pagarle a algún vecino que tenga auto para que los lleve a hacer las compras o trámites.
En el sector de Las Peñas, viven 57 familias, y de ellas sólo 5 participan en la capilla, lo que representa menos de un 10 % de familias católicas en la población.
Monseñor culminó el día celebrando el sacramento de la confirmación en la Parroquia de Arauco, donde 108 personas de entre 17 y 83 años de edad confirmaron su fe acompañados de amigos y familiares que repletaron la Parroquia. “Dios nos llamó cuando él quiso y cómo él quiso, igual que a estos jóvenes que quisieron inscribirse para realizar su confirmación, porque él nos amó primero, y antes de que naciéramos ya había pensado en nosotros”, dijo el Arzobispo en la homilía.
