Este sábado 1 de mayo de 2021, a las 12.00 horas, se celebró la eucaristía en conmemoración del Día del Trabajo. La Santa Misa fue presidida por Monseñor Fernando Chomali y se transmitió a través de Facebook, el canal de YouTube de la Iglesia de Concepción y Radio Chilena 103 AM.
Resulta importante destacar que la celebración litúrgica tuvo lugar en la Parroquia del Sagrario y se realizó respetando todas las medidas de cuidado establecidas por la autoridad sanitaria.
En su homilía, Monseñor Fernando Chomali se refirió al escenario laboral que hoy enfrenta Chile a raíz de la crisis sanitaria. “Si queremos saber cómo está un país, tenemos que mirar qué pasa con sus trabajadores. La clave de la cuestión social es el trabajo. Han pasado ya algunos años de esos grandes visionarios que hicieron grandes esfuerzos, dieron una gran lucha, para que se terminara con la explotación, para que hubiese trabajo justamente remunerado, un tiempo de descanso y terminar con el trabajo infantil”.
Tras lo anterior, agregó: “Pero lamentablemente no se ha avanzado todo lo rápido que quisiéramos, y la pandemia que nos ha golpeado tan fuerte lo ha manifestado con mucha claridad. Son muchas las personas que han perdido sus trabajos porque se desempeñaban en pequeñas empresas, muy frágiles y precarias, que no han conseguido crédito suficiente para seguir funcionando”.
Desde esa perspectiva, el Arzobispo de Concepción, abordó la problemática que existe tras la informalidad laboral de muchos trabajadores. “Hay personas que trabajan en condiciones inhumanas e incluso, lamentablemente, personas que aprovechándose de la vulnerabilidad de los migrantes, les dan trabajo sin ningún tipo de protección social con salarios miserables”.
En ese marco, Monseñor Fernando Chomali enfatizó en la necesidad de promover trabajos humanos, en los que prime la dignidad. “Si queremos una sociedad justa, tenemos que promover el trabajo humano, trabajos dignos, con sueldos suficientes para que la persona pueda cuidar de buena forma a su familia y tener un feliz descanso”.
“La dignidad del trabajo radica en el hecho de que es realizado por una persona. Su valor subjetivo es infinitamente superior a su valor objetivo y si queremos pasar la pandemia de la mejor forma posible, tenemos que promover fuentes de trabajo porque nada sustituye la alegría interior que experimenta un hombre o una mujer de llevar los alimentos a su hogar, después de haber trabajado y de haber sentido que colabora con la sociedad a través de sus dones, que colabora al bien común”, añadió.
Asimismo, el Arzobispo de Concepción reparó en la necesidad de dialogar sobre la relevancia del trabajo. “El gran ausente en el debate público ha sido el trabajo, porque ha quedado de manifiesto su precariedad, que no ha sido el foco de la discusión público y creo que eso nos ha llevado a un gran descalabro, que sumado a la crisis sanitaria, generó un descalabro económico con altas tasas de cesantía”.
También, realizó una invitación a toda la comunidad. “Quienes tenemos un trabajo estable, debemos dar gracias a Dios todos los días. Tenemos que dar gracias a Dios de poder tener un plato de comida que surge de nuestro esfuerzo y eso nos debe llevar a ser solidarios. Asimismo, quiero felicitar y agradecer a las personas que trabajan voluntariamente, con un esfuerzo sobrehumano, para llevar el pan al que no lo tiene, para acompañar al que está solo y vestir al que esté desnudo”.
Finalmente, Monseñor Fernando Chomali le pidió a Dios por un país más justo y solidario. “Dios quiera que este día nos amplíe la mirada de nuestro propio país y descubramos que la clave de la cuestión social es el trabajo humano. El trabajo tiene que estar orientado a que todos seamos más y podamos tener una vida conforme a la dignidad que Dios no ha entregado”.
