La misa fue presidida por Monseñor Fernando Chomali, en donde agradeció por la vocación y la dedicación de religiosos y religiosas. Después de esta celebración, todos compartieron un almuerzo en casa Betania.
A tempranas horas de la mañana de este jueves 15 de agosto, decenas de religiosas y religiosos se dirigían al Monasterio de las Carmelitas Descalazas, ubicado en Camino a Santa Juana. El objetivo era celebrar el día de la vida religiosa, en el marco de la fiesta que conmemora la asunción de la Santísima Virgen María.
“Estamos aquí con mucha alegría porque para nosotros es muy importante este día, que celebra la vida religiosas donde nosotros hemos dicho sí al Señor. Con alegría vivimos nuestra fiesta, pues hoy la Virgen María subió a los cielos”, comentó la Hermana Elvira Ramírez.
Así mismo, la Hermana María Lizama agregó que “este es un día Mariano, en donde la vida religiosa, principalmente femenina, encuentra su inspiración en la consagración al Señor y en la acción”.
La eucaristía que se celebró en honor a este día, fue presidida por Monseñor Fernando Chomali, quien agradeció por la vocación de tantos religiosos y religiosas en nuestra Arquidiócesis. “Reunirse con las religiosas y con los religiosos es una gran alegría para mí como Arzobispo. En primer lugar, por su testimonio de fe, de entrega, por su trabajo pastoral; son signos del amor de Dios en tantas comunidades, por lo tanto, estar acá y almorzar con ellos es un signo de profundo agradecimiento por todo lo que hacen y por todo lo que son”, comentó.
Luego de la eucaristía todos los participantes pudieron compartir un almuerzo fraterno en casa Betania.