Con palabras de aliento a los equipos pastorales, monseñor Fernando Chomali inició el encuentro mensual del personal apostólico de la Arquidiócesis de Concepción, que se realizó en casa Betania. En dicha oportunidad, tres vicarías pastorales dieron a conocer su trabajo bajo el liderazgo de laicos, en particular de mujeres.
Gabriela Gutiérrez, delegada episcopal de la Vicaría de Pastoral Social, comentó que con este nuevo rol se está viviendo un proceso de transición y de ajuste. “Veo, a dos meses de este nuevo rol, un proceso de implementación y estamos tratando de ajustar los equipos, en lo organizacional. En lo que es la misión, tenemos dos áreas trabajo, pastoral y animación pastoral y de proyectos. El mayor desafío es poder lograr mejores vínculos entre los equipos. Por la naturaleza del trabajo de cada uno, hay algunos déficits en algunos vínculos, que tenemos que asumir”, añadió.
Dijo que en los últimos años la opción es poder estar en las periferias existenciales, porque han surgido nuevos rostros a los que hay que acoger, como las personas en situación de calle, adultos mayores, personas con capacidades diferentes.
Como Vicaría de Pastoral Social se quiere animar y hacer presente la dimensión social en todos los espacios de la Iglesia. “Nadie debería excluirse”, recalcó.
Adriana Fernández, delegada episcopal para la Educación, expresó tener una visión clara del ámbito educativo, avalado por su experiencia en esta área. Indicó que se trabaja básicamente con los colegios de Iglesias y sus distintos estamentos. Además, se trabaja con los profesores de religión y con los colegios no confesionales y, además, se está profundizando un trabajo con los profesores católicos, en general. Recordó que en el decanato del Carbón hay una experiencia que puede analizarse y replicar en otros decanatos.
Adriana confidenció, desde su nuevo rol, una experiencia muy enriquecedora y que está con mucho entusiasmo por realizar muchos desafíos, aunque éstos son muchos. “Confío en que el Señor nos acompañe en esta misión”, concluyó.
Fernanda Lara, en representación de la delega episcopal de la Vicaría para el Servicio de la Niñez, Morín Contreras, señaló que como equipo tienen muy presente lo anunciado por el Papa Francisco, de salir de las zonas de confort y enfrentar las periferias existenciales. Por ello, iniciaron un trabajo de terreno, comenzando por comunidades del Decanato Rural, lo cual agradeció a los sacerdotes que han abierto sus puertas para apoyar el trabajo evangelizador con los niños. “Sabemos que en todos los lugares hay niños y queremos saber en qué están. El Papa ha dicho que los niños son el futuro de la Iglesia”, subrayó.
Valoró el trabajo de Movimientos como Cevas, Jupach e Infancia Misionera, para lo cual el equipo de la Vicaría ha estado acompañando. Anunció que el 4 de mayo, entre las 9 y las 12 horas, se realizará un encuentro de acólitos, en casa Betania.
Recordó que sigue trabajando el equipo de Pastoral con Niños, asumiendo diversas tareas, entre las cuales ha estado la visibilización de la Vicaría a través de redes sociales y la producción de material impreso.