Cerca de 100 personas participaron en el Segundo Encuentro Nacional de Danzas y Expresiones, que se realizó este sábado 29 de julio en las dependencias del Colegio Clorinda Avello y de la Parroquia Inmaculada Concepción de Santa Juana.
Este encuentro estaba dirigido a dirigentes y predirigentes de la Juventud Parroquial Chilena (Jupach) de la Arquidiócesis de Concepción y de la Diócesis de Los Ángeles. Además, estuvieron presentes los miembros de un grupo local de Jupach que se está formando en Rengo, perteneciente a la Diócesis de Rancagua.
La jornada se realizó entre las 09:00 y las 17:00 horas, comenzando con la Santa Misa, que fue presidida por el Obispo Auxiliar de Concepción, Monseñor Bernardo Álvarez. Luego, durante la mañana, se realizaron cuatro talleres: Expresión Corporal, Creación de Danzas y Expresiones, Impostación de la Voz y Manejo de las Emociones-Coaching Grupal.
Mientras que durante la tarde, grabaron las danzas y expresiones -también conocidas como dinámicas- con el fin de contar con un compilado que puedan subir a un drive y a YouTube y que todos puedan acceder a estos recursos.
La Coordinadora Nacional de Jupach, Camila Salgado, explicó que Jupach cuenta con diferentes grupos de apoyo, entre los que se encuentra el Equipo de Formación “que se encarga de crear nuevos grupos donde no hay”, el Equipo de Revista, que se encarga de la revista jupachina donde se abordan de manera mensual “los valores y los temas a tratar”, el Equipo de Materiales que crea “nuevos materiales y actualiza y digitaliza el que ya existe”, como cancioneros o juegos, y el Equipo de Danzas y Expresiones.
En ese contexto, detalló que “la jornada estaba dirigida a los predirigentes, a los dirigentes y también se extendió la invitación a los aspirantes, que son jóvenes de 15 a 17 años que pertenecen a la sección naranja, que se están preparando para formar parte del equipo de dirigentes (…), para que también se fueran interiorizando en cómo se trabaja con Jupach”.
El Coordinador del Equipo Nacional de Materiales, Felipe Ponce, comentó que actualmente se encuentran trabajando “en un cancionero y en un manual de expresiones y danzas” y agregó que esta jornada “tiene como principal fin recopilar y grabar videos de las danzas y expresiones existentes” y también entregar “un conocimiento nuevo” a los dirigentes y aspirantes, acerca de estas dinámicas “que sirven para poder relacionarnos de mejor manera con los niños, para generar conexión, confianza, expresión (…) y sentido de pertenencia”.
Felipe destacó que hubo “una participación bastante enriquecedora, fue un momento idóneo también para generar nuevos lazos, nuevas conexiones con la gente de otros lados (…) Fue enriquecedor en todo sentido, tanto en el ámbito de experiencia, nuevos lazos, amistades, reencuentro entre los que llevan más tiempo, y también que los dirigentes nuevos y los aspirantes puedan aprender cosas nuevas y enriquecer su mente para poder ser, el día de mañana, mucho mejores dirigentes que nosotros, que vayan evolucionando y lleven al movimiento a un nivel mucho más alto y ojalá que siga creciendo”.
“Esa es la idea, que todos ellos vayan generando nuevos lazos y que vayan teniendo herramientas nuevas para poder contagiar a más niños y más jóvenes de este bonito movimiento, que contagien nuevos corazones de amarillo y que Jupach siga creciendo, porque es un movimiento bastante bonito”, enfatizó.
La Coordinadora Nacional de Jupach agradeció las gestiones realizadas por el Asesor Arquidiocesano de Jupach, Padre Ricardo Valencia, para que este encuentro fuera posible. Y también valoró la presencia de Monseñor Bernardo Álvarez, señalando que “los chiquillos lo vieron súper cercano y estaban súper sorprendidos y agradecidos de su participación y de que se haya dado el tiempo de conocernos”.
Por su parte, la Delegada Episcopal de la Vicaría de la Niñez, Fernanda Lara, manifestó que “estamos muy contentos por la numerosa participación de jóvenes en el encuentro, en que se reunieron grupos a nivel nacional, fortaleciendo así los lazos de fraternidad y trabajo colaborativo, que deriva en el acompañamiento de niños y niñas para su crecimiento integral y, en especial, el enriquecimiento en la fe de los más pequeños de nuestra Iglesia, que tienen como gran amigo a Jesús”.
