El celular

Publicado el: 29 Mayo, 2023

Diario El Mercurio publicó una Carta al Director escrita por el Arzobispo de Concepción, Monseñor Fernando Chomali, y titulada “El celular”, la mañana de este lunes 29 de mayo. La compartimos a continuación:

El celular entró con fuerza en nuestras vidas. Si se nos queda en la casa, volvemos a buscarlo; si lo perdemos, nos sentimos fuera de la sociedad.

Para muchos es compañía y entretención. Podemos ver emails, estar conectados con las personas que queremos. Nos sugiere la mejor ruta para llegar a un lugar. Podemos contar qué estamos haciendo, dónde estamos y opinar.

El ignorante y el docto, el rico y el pobre lo tienen. Además, podemos hablar por teléfono. El celular hace lo mismo: permite saber cuáles son nuestros gustos, los temas que nos interesan, dónde estamos y con quién nos comunicamos. Estamos observados. Nos llegarán mensajes personalizados incitándonos a comprar.

Con la irrupción del celular las relaciones sociales han cambiado. Es difícil encontrar más de dos personas reunidas conversando o comiendo, sin que al menos una lo esté mirando. Allí está su mundo y sus afectos. Es fácil convertirlo en una adicción.

Si alguien invita a una comida a su casa y pide que sea sin celular a la vista, lo más probable que muchos se excusen.

Para las personas más solas es un buen antídoto contra el aburrimiento. El celular genera emociones, nos hace reír y llorar, pero también nos aísla.

He visto a papás entregárselo a sus hijos de corta edad para que “dejen de molestar”. A nosotros, ya viejos, las jóvenes generaciones nos entregarán algo parecido para dejarnos tranquilos.

El celular es tirano. ¡Vaya uno a no contestar un email o mensaje en menos de un minuto!

Pronto será un lujo conversar. El celular no nos ofrecerá un café, no nos preguntará cómo estamos y menos irá en nuestro auxilio cuando, como dice Santa Teresa de Ávila, estemos hartos de mucho y llenos de nada.

+Fernando Chomali
Arzobispo de Concepción

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