Los Madrugadores de la Arquidiócesis de Concepción se reunieron el sábado 4 de marzo a las 06:30 horas en el Santuario de Montahue de Concepción para dar inicio a las Madrugadas 2023.
En la actividad participaron hombres de las comunidades de Madrugadores de Colcura, Laraquete, Coronel, Chiguayante, Yumbel, Santa Juana y de distintos puntos del Gran Concepción, quienes tras la última Madrugada 2022, que se realizó en el Cerro La Virgen el 31 de diciembre, habían acordado volver a reunirse el primer sábado de marzo de 2023.
Fue así que llegaron hasta el Santuario de Schoenstatt junto al Obispo Auxiliar de Concepción, Monseñor Bernardo Álvarez, para rezar el Rosario y celebrar la Santa Misa.
El Coordinador de los Madrugadores de Montahue, Jorge Moraga del Solar, señaló que lo central de la homilía de Monseñor Álvarez, fue que “humanamente nada podemos hacer si no permanecemos en Cristo: sólo por Él, con Él y en Él tendremos fecundidad en nuestro ser y actuar”.
Luego de la Santa Misa, con profunda alegría, peregrinaron hasta la capilla para saludar a la Madre y Reina tres veces admirable. Posteriormente, compartieron un rico desayuno.
Además, aprovecharon la ocasión para celebrar los ocho años de la comunidad de Madrugadores de Chiguayante, y también para reunir enseres de cocina para los afectados por los incendios en Santa Juana.
Jorge Moraga manifestó que “con este encuentro salimos todos fortalecidos a cumplir la misión de remar mar adentro hacia las otras playas y ser pescadores de muchas almas que buscan al Señor, pero que nadie “los pesca”. Es nuestra misión y tarea encantar a muchos varones para que gusten y vean lo bueno que es el Señor”.
“De la mano de la Gran Misionera y permaneciendo en el Señor Jesús lograremos la anhelada fecundidad apostólica”, enfatizó.
La próxima Madrugada Arquidiocesana esperan realizarla el 27 de mayo, en vísperas de Pentecostés.
Recordemos que los Madrugadores son un grupo de varones laicos que se reúnen los sábados a las 07:00 horas para orar juntos y celebrar la Eucaristía, compartir la mesa del desayuno y luego prolongar su ser Madrugador en el mundo, evangelizando a través de su testimonio de vida. Es así que lo central de su espiritualidad está representado en las 3M: Misa-Mesa-Misión.
