donar

Yusef Hadi: “Me levanto todos los días agradecido de Dios”

Publicado el: 8 Junio, 2011

Cada mañana los matinales de TV acompañan a gran parte de la población chilena, en el matinal de nuestra Región un joven simpático informa, entretiene y alegra a los que siguen el programa Nuestra Casa.

Yusef es un hombre tranquilo, atento y cordial,  que habla abiertamente del amor que siente por sus padres José y Nancy; por sus hermanos: Cristian, Carla, Monserratt, Farad y Fouad; y de lo importante que es vivir en familia, sabiendo que Dios está presente siempre, incluso, cuando las cosas no andan según lo proyectado.

¿Cómo es tu vida familiar?

Desde pequeño siempre tuve una imagen de vida familiar con mucha gente. Vivimos muy aclanados y con muchas tradiciones. Siempre comíamos en una mesa con harta gente acompañada de mucha conversación y sobremesa. Hoy, la mayoría de mis hermanos se han ido del hogar y tienen sus familias o vidas independientes. Yo aún vivo con mis padres, lo que me permite mantener una vida familiar muy cercana a ellos, pero con cierta frecuencia nos reunimos con algunos de mis hermanos en almuerzos familiares dentro del tiempo y posibilidades de cada uno.

¿Es muy difícil ser conocido?

Para ser honesto, no he sentido de una manera directa esto de ser conocido. Si bien en algunas ocasiones más de alguna persona me reconoce en la calle y me saluda, he tenido gratas sorpresas cuando en alguna ocasión se me ha acercado alguna persona para felicitarme por mi desempeño o por el programa. Es en verdad gratificante sentir la cercanía con la gente, sentir una buena respuesta en personas que son finalmente para quien uno realiza este trabajo de conducir un programa matinal, el que tiene por objeto prestar un servicio informativo y de apoyo. Y si este trabajo se traduce en la buena aceptación o un saludo amable de alguna persona que me ve cuando camino en la calle, sin duda alguna se agradece.

¿Te sientes una persona de fe?

Claro que sí. Gracias a Dios nací en el seno de una familia en la que desde muy pequeño me inculcaron valores cristianos y en donde una de estas enseñanzas fue precisamente el trabajo en la fe. Creo que todos los procesos de la vida, algunos más complicados que otros, son parte del crecimiento que tenemos todos como personas, teniendo fe por supuesto que todo esto nos lleva a algo bueno. Muchas veces cuesta creer que todo pasa por y para algo, es difícil, pero es ese trabajo diario en el alma de uno, el que nos permite levantarnos con la convicción de que cada día nuevo es una oportunidad de hacer bien las cosas. Que si estamos vivos es por algo, y teniendo fe tenemos la convicción de que es para algo bueno.

¿Cómo manifiestas tu fe en el trabajo en que te desenvuelves?

Levantándome todos los días agradecido de Dios por estar vivo, e intentando transmitir esas ganas en mi trabajo. Es una responsabilidad tremenda el estar detrás de una pantalla comunicando noticias, información o espacios que pueden, sin duda, ser de una gran ayuda a muchas personas que nos ven o incluso a veces para las cuales somos la única  compañía en las mañanas. Es por esto que siento la necesidad de poder entregar de la mejor forma posible un mensaje alentador para quienes comienzan el día mirando el programa.

¿Has visto que Dios está presente en medio de tu vida? ¿Cómo?

Sin duda en cada cosa que hago. Desde que me levanto hasta cuando me acuesto. Cada etapa de mi vida, cada proceso, por difícil o complicado que fuera en su momento, permitió que pudiera llegar a donde estoy hoy.  Aún me queda mucho por avanzar y aprender. Algún día espero formar una familia, tener hijos y poder así entregar parte de lo mucho que a mí se me ha dado. Hubo, sin duda, etapas muy complicadas de mi vida, en la cual hubo preguntas y dudas que me afligieron en ese instante, pero siempre la respuesta final a cada uno de esos momentos fue entregar las cosas a Dios. Está presente en esa oración cortita de la mañana antes de empezar el trabajo. En esa plegaria para empezar a trabajar en un nuevo proyecto. En esa conversación íntima cuando uno está solo. En la noche para decir gracias por el día.

¿Como es tu relación con Dios?

Muy íntima y cercana. De conversación diaria. De consultar cada cosa que hago. Y por sobre todo de confianza. Me siento muy agradecido de todas las cosas que me han pasado en la vida, incluso de aquéllas que en un momento no entendí, pero que hoy sé que fueron para algo. Agradezco a Dios cada una de las cosas que me ha dado.

 

Yusef Hadi: “Me levanto todos los días agradecido de Dios”

Cada mañana los matinales de TV acompañan a gran parte de la población chilena, en el matinal de nuestra Región un joven simpático informa, entretiene y alegra a los que siguen el programa Nuestra Casa.

Yusef es un hombre tranquilo, atento y cordial,  que habla abiertamente del amor que siente por sus padres José y Nancy; por sus hermanos: Cristian, Carla, Monserratt, Farad y Fouad; y de lo importante que es vivir en familia, sabiendo que Dios está presente siempre, incluso, cuando las cosas no andan según lo proyectado.

¿Cómo es tu vida familiar?

Desde pequeño siempre tuve una imagen de vida familiar con mucha gente. Vivimos muy aclanados y con muchas tradiciones. Siempre comíamos en una mesa con harta gente acompañada de mucha conversación y sobremesa. Hoy, la mayoría de mis hermanos se han ido del hogar y tienen sus familias o vidas independientes. Yo aún vivo con mis padres, lo que me permite mantener una vida familiar muy cercana a ellos, pero con cierta frecuencia nos reunimos con algunos de mis hermanos en almuerzos familiares dentro del tiempo y posibilidades de cada uno.

¿Es muy difícil ser conocido?

Para ser honesto, no he sentido de una manera directa esto de ser conocido. Si bien en algunas ocasiones más de alguna persona me reconoce en la calle y me saluda, he tenido gratas sorpresas cuando en alguna ocasión se me ha acercado alguna persona para felicitarme por mi desempeño o por el programa. Es en verdad gratificante sentir la cercanía con la gente, sentir una buena respuesta en personas que son finalmente para quien uno realiza este trabajo de conducir un programa matinal, el que tiene por objeto prestar un servicio informativo y de apoyo. Y si este trabajo se traduce en la buena aceptación o un saludo amable de alguna persona que me ve cuando camino en la calle, sin duda alguna se agradece.

¿Te sientes una persona de fe?

Claro que sí. Gracias a Dios nací en el seno de una familia en la que desde muy pequeño me inculcaron valores cristianos y en donde una de estas enseñanzas fue precisamente el trabajo en la fe. Creo que todos los procesos de la vida, algunos más complicados que otros, son parte del crecimiento que tenemos todos como personas, teniendo fe por supuesto que todo esto nos lleva a algo bueno. Muchas veces cuesta creer que todo pasa por y para algo, es difícil, pero es ese trabajo diario en el alma de uno, el que nos permite levantarnos con la convicción de que cada día nuevo es una oportunidad de hacer bien las cosas. Que si estamos vivos es por algo, y teniendo fe tenemos la convicción de que es para algo bueno.

¿Cómo manifiestas tu fe en el trabajo en que te desenvuelves?

Levantándome todos los días agradecido de Dios por estar vivo, e intentando transmitir esas ganas en mi trabajo. Es una responsabilidad tremenda el estar detrás de una pantalla comunicando noticias, información o espacios que pueden, sin duda, ser de una gran ayuda a muchas personas que nos ven o incluso a veces para las cuales somos la única  compañía en las mañanas. Es por esto que siento la necesidad de poder entregar de la mejor forma posible un mensaje alentador para quienes comienzan el día mirando el programa.

¿Has visto que Dios está presente en medio de tu vida? ¿Cómo?

Sin duda en cada cosa que hago. Desde que me levanto hasta cuando me acuesto. Cada etapa de mi vida, cada proceso, por difícil o complicado que fuera en su momento, permitió que pudiera llegar a donde estoy hoy.  Aún me queda mucho por avanzar y aprender. Algún día espero formar una familia, tener hijos y poder así entregar parte de lo mucho que a mí se me ha dado. Hubo, sin duda, etapas muy complicadas de mi vida, en la cual hubo preguntas y dudas que me afligieron en ese instante, pero siempre la respuesta final a cada uno de esos momentos fue entregar las cosas a Dios. Está presente en esa oración cortita de la mañana antes de empezar el trabajo. En esa plegaria para empezar a trabajar en un nuevo proyecto. En esa conversación íntima cuando uno está solo. En la noche para decir gracias por el día.

¿Como es tu relación con Dios?

Muy íntima y cercana. De conversación diaria. De consultar cada cosa que hago. Y por sobre todo de confianza. Me siento muy agradecido de todas las cosas que me han pasado en la vida, incluso de aquéllas que en un momento no entendí, pero que hoy sé que fueron para algo. Agradezco a Dios cada una de las cosas que me ha dado.

 

Publicado el: 8 Junio, 2011
© Arzobispado de Concepción