El Obispo Auxiliar de Concepción y Vicario Episcopal de Arauco, Monseñor Oscar García, presidió la Eucaristía, junto al Padre Gilberto Matuz, en la Parroquia Nuestra Señora del Carmen de Cañete y Tirúa, la tarde del viernes 16 de junio, Solemnidad del Sagrado Corazón de Jesús.
En su homilía, Monseñor Oscar invitó a la comunidad a permitir que el Corazón de Jesús y el Corazón de la Santísima Virgen María entren en sus corazones, y también a dejarse iluminar por el Señor.
Haciendo alusión al Evangelio de San Mateo 11, 25-30, donde dice que Jesús alaba a Dios Padre por haber ocultado estas cosas a los sabios y haberlas revelado a los pequeños, afirmó que también la Virgen María proclama esto en el Magnificat al decir que el Señor ha mirado su humildad y su pequeñez, y ha hecho obras grandes.
“Cuando nos reconocemos pequeños ante la presencia del Señor y nos dejamos tocar por su gracia, Él hace cosas grandes, maravillosas e increíbles, y va mucho más allá de nuestras lógicas humanas”, enfatizó.
En ese contexto, sostuvo que “es importante saber ver, reconocer en la vida personal, familiar y comunitaria, la presencia del Señor. Porque, de lo contrario, miraríamos nuestra propia realidad con los ojos humanos y entonces frente a ciertas circunstancias la respuesta podría ser que se dio por casualidad, y sabemos que la casualidad no existe, sino que existe la Providencia, esa Providencia que quiso poner su mirada sobre nosotros y en su gran amor infinito y misericordioso, manifestarse de una forma extraordinaria, en la persona de nuestro Señor Jesucristo”.
Monseñor Oscar recalcó la importancia de responder a la propuesta de Dios, de recibirlo en el corazón y hacerlo parte de nuestra vida, vivir a la luz del Evangelio, impregnando nuestra realidad “para que también tantos hermanos lo puedan conocer, lo puedan amar y lo puedan seguir. Pero sobre todo, experimentar ese amor que nadie en el mundo puede dar, sólo Él”.
El Vicario Episcopal de Arauco exhortó a la comunidad a preguntarse “¿cuál es la experiencia que tenemos del amor de Dios cada uno de nosotros? (…) Y si la experiencia no es grande, preguntémonos ¿por qué a mí me cuesta experimentar el amor de Dios?”. En ese sentido, destacó que la Virgen María nos enseña a estar atentos a la escucha de su Palabra y a orar abriendo el corazón a la voluntad del Señor.
En el momento de la presentación de las ofrendas, fueron llevadas al Altar tarjetas con rosarios como símbolo de “de nuestra oración dedicada a la Virgen, como respuesta a su maternal protección”.
Con esta Eucaristía se dio inicio al mes de preparación para la Fiesta Patronal, que se celebrará el 16 de julio, por lo que se realizó el envío de distintas imágenes de la Virgen del Carmen que recorrerán las comunidades y familias de la comuna.
Previo a la celebración eucarística en la Parroquia Nuestra Señora del Carmen de Cañete, Monseñor Oscar García impartió sacramentos de Bautismo, Primera Comunión y Confirmación a jóvenes y adultos en la Comunidad Sagrado Corazón de Jesús de Cayucupil.
